Llegó la hora, el bebé está creciendo y pronto la leche materna no será capaz de cubrir todas sus necesidades nutricionales. Es el momento de complementar la lactancia con nuevos alimentos y se trata de un período clave para programar la salud del futuro adulto (post 1) (post 2)

Ya desde la primera infancia, en función de qué y cómo comamos estaremos afianzando un ecosistema intestinal diverso y sano o más bien proclive a la enfermedad.

La lactancia materna es un pilar de salud, fortalece el sistema inmune del bebé, protege su microbiota y puede prevenir enfermedades alérgicas como rinitis, dermatitis atópica, asma, neumonía, otitis, diarrea e incluso en el futuro diabetes tipo II o enfermedad inflamatoria intestinal… Por tanto, siempre que sea posible y madre e hijo así lo decidan será la mejor opción durante los dos primeros años de vida. Aunque por supuesto, dar pecho no convierte al bebé en un “superbebé” ni dejar de hacerlo a la mamá en “malamadre”, seamos respetuosos.

¿HASTA CUANDO LACTANCIA MATERNA?

Exclusiva hasta los 6 meses y recomendable a demanda hasta los 2 años. (Sabemos que en ciertos momentos puede ser duro pero a demanda significa cuando el niño quiere, siguiendo sus sensaciones de hambre-saciedad y recompensa).

Entre los 6 y 12 meses la leche materna sigue siendo el alimento principal. Tiene la propiedad de adaptarse a los requerimientos energéticos y nutricionales del lactante, cuanto mayor es más calorías tiene porque sus necesidades son mayores. Además cambia de sabor según los alimentos que ingiere la madre, por tanto los bebes amamantados se adaptaran con mayor facilidad a los distintos sabores futuros. ¡Esto sí que es un superalimento!

ALIMENTACIÓN COMPLEMENTARIA (AC)

Comienza aproximadamente a partir de los 6 meses. Como bien dice su nombre se trata de complementaria y no sustitutiva. No consiste en quitar la leche materna o de fórmula sino introducir alimentos complementarios siempre después de ésta.

No hay ninguna base científica para recomendar introducir un alimento antes que otro. Lo fundamental es que sean sanos (no procesados) y con poco potencial alergénico. En estos primeros meses es cuando el sistema inmune del bebé ira produciendo la inmunotolerancia, es decir, un proceso de escaneo y aprendizaje de lo que es bueno para su salud y lo que no, por ello lo haremos con cautela y alimento por alimento, dejando unos 3 días entre uno y otro.

El BLW (Baby Led Weaning o lntroducción Autogestionada por el bebé) nos parece una parece una opción que se acerca al sentido común y la coherencia evolutiva, vamos a analizarla.

BLW

Es un método de introducción de la alimentación complementaria que consiste en dejar que el bebé se alimente por sí mismo cogiendo con sus manos los alimentos sólidos desde el principio (sin necesidad de triturados ni purés), y que decida qué alimentos quiere comer.

Los padres ponen a su alcance alimentos y el niño elije en función de sus gustos, preferencias y sobre todo de su apetito, respetando las señales de hambre y saciedad. Se ofrecen alimentos enteros o a trocitos y él mismo los come.

Es fundamental paciencia para la práctica, y siempre manteniendo la lactancia materna o artificial a demanda como base para evitar carencias.

¿Cómo se si mi bebé esta preparado? 4 Signos indispensables:

  1. Se sienta erguido y mantiene la cabeza erguida.
  2. Coordina ojos, manos y boca para mirar el alimento, cogerlo y llevárselo a la boca.
  3. Ya no tiene el reflejo de extrusión: reflejo de expulsión que tienen los bebes para no ahogarse cuando les pones en la boca algo que no sea la teta para no ahogarse. Puede masticar aunque no tenga dientes y tragar sólidos.
  4. Muestra interés por la comida.

No es matemático, pero es raro que todo esto aparezca antes de los 6 meses.

Beneficios:

  • Ofrece la oportunidad de explorar sabores, texturas, formas, colores, olores y apariencias facilitando la aceptación de alimentos con los que va a convivir el resto de su vida.
  • Contribuye al desarrollo de sus habilidades motrices fomentando su autonomía, independencia y coordinación a la hora de comer.
  • Promueve el respeto de las señales de hambre-saciedad y los ritmos de cada niño.
  • Se ofrece comida real desde el principio evitando papillas de cereales y potitos procesados con su correspondiente aporte de azúcares y sal.
  • Previene la sobrealimentación y la obesidad infantil (casi el 50 % de nuestros niños sufren exceso de peso). El pequeño regula la cantidad que consume según sus necesidades. La delgadez no es una enfermedad, es una condición. Sin embargo, la obesidad si es lo es.
  • Invita a la familia a educar en una alimentación saludable mediante el ejemplo y la creación de buenos hábitos.
  • Ahorra tiempo y esfuerzo ya que se prepara una única comida para toda la familia.

Recomendaciones y precauciones:

  • Nunca dejes al bebe solo con la comida, y prueba los alimentos antes de dárselos. El atragantamiento no es más frecuente en niños que hacen BLW que en los que comen triturado.
  • No pongas nada en su boca, que el mismo coja la comida. Asegúrate que el alimento sea tan grande como su puño.
  • Alimentos a evitar:
    • Aquellos que formen una pasta en la boca (ejemplo una gran miga de pan).
    • Alimentos duros que no pueda chafar con su lengua (verdura cruda como zanahoria, coco, fruta verde…)
    • Alimentos pequeños y con forma de moneda (frutos secos, uvas, dulces, caramelos, palomitas, frutas con pepita…)
    • Frutas cítricas a no ser que pelemos cada gajo.
  • Evita introducir alimentos complejos a la vez (ejemplo: una tortilla de patata lleva patata, huevo, cebolla y aceite) ir de uno en uno y si todo va bien combinarlos.
  • El pescado, marisco, huevo, lácteos, frutos secos y gluten es buena idea introducirlos de uno en uno por su potencial alergénico.

Fuentes: